La compañía aeroespacial de Elon Musk no detiene su marcha y continúa ampliando su infraestructura global. Este martes 2 de diciembre de 2025, un cohete Falcon 9 protagonizó un nuevo despegue exitoso desde la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral, en Florida. La misión, catalogada como Starlink 6-95, partió puntualmente a las 17:18 (hora del este) desde el Complejo de Lanzamiento 40 llevando a bordo una carga de 29 satélites de internet destinados a sumarse a la red existente.
Este lanzamiento refuerza la capacidad operativa de la firma, que se jacta de ser el único operador con la autonomía para poner en órbita sus propios equipos según la demanda lo requiera, manteniendo un ritmo de actualizaciones constantes y costos de lanzamiento reducidos. Esta logística permite sostener una constelación que orbita a unos 550 kilómetros de la Tierra, una distancia significativamente menor a los 35.000 kilómetros donde se ubican los satélites geoestacionarios tradicionales. Gracias a esta ubicación en órbita baja, la latencia —ese tiempo que tardan los datos en ir y volver— se reduce drásticamente a unos 25 milisegundos, frente a los más de 600 que suelen tener otros servicios satelitales.
Oportunidad para el bolsillo local
Mientras la flota crece en el espacio, en suelo argentino la noticia pasa por una agresiva estrategia comercial. El servicio, que comenzó a operar en el país en marzo de este año, se encuentra ofreciendo descuentos importantes para quienes adquieran el kit antes de fin de agosto. Acceder a Starlink implica considerar un doble costo: por un lado, la inversión inicial en el hardware —la antena que el usuario instala por su cuenta sin necesidad de técnicos— y, por otro, el abono mensual para mantener la conexión.
En el marco de esta oferta, el precio de la antena, que habitualmente se ubica en 499.999 pesos, ha bajado a un valor promocional de 249.999 pesos. Del mismo modo, el costo del servicio mensual también se vio beneficiado: el abono, que suele costar 62.500 pesos, se consigue ahora por 56.100 pesos al mes. Es una rebaja considerable que busca hacer más atractivo el ingreso a la red satelital en un contexto económico complejo.
Conectividad donde la fibra no llega
Esta tecnología resulta particularmente relevante para la geografía argentina, donde llevar banda ancha mediante los métodos tradicionales de fibra óptica o cable coaxil suele ser extremadamente costoso o inviable en zonas rurales. Starlink se posiciona así como una solución robusta para conectarse desde casi cualquier punto del planeta.
En términos de rendimiento, la propuesta de SpaceX es competitiva. Según datos de abril de la firma Ookla, el promedio de velocidad de descarga en Argentina rondaba los 84,2 Mbps, con una subida de 36,5 Mbps. En comparación, Starlink asegura que su ancho de banda estándar oscila entre los 25 y 100 Mbps, pudiendo escalar hasta los 220 Mbps de descarga si se opta por una conexión prioritaria. Con la incorporación de los nuevos satélites lanzados esta semana, la promesa es mantener esa estabilidad y cobertura mientras la demanda de usuarios sigue en aumento.
More Stories
Alexa se reinventa: así funciona el nuevo asistente con IA avanzada y qué es el “Modo Súper”
El caos de la TV moderna: Cortes de canales y la jungla de controles remotos
La nueva actualización de Windows 11 llega para eliminar programas y dar más control a los usuarios